Hoy enfrentamos un mercado dinámico y cambiante, insertos en temas medioambientales, cambios político-sociales, inflación mundial y problemas sanitarios derivados del covid.
En este escenario, la mayoría de los stakeholders están considerando que las empresas debieran impulsar el desarrollo social, la sostenibilidad ambiental y el crecimiento inclusivo dentro de sus prioridades y como core de la planificación de su negocio. Es por esta razón que la CMF (Comisión para el Mercado Financiero) también se está haciendo cargo de aquello, a través de la NCG 461 que incorpora la obligación a las sociedades abiertas en bolsa de informar y acreditar temáticas de sostenibilidad y gobierno corporativo en sus respectivas Memorias Anuales.
Y es que, desde la mirada empresarial, normativa y entorno, cada día se hace más necesario contar con estructuras innovadoras y con una gobernanza e inversión vinculada al propósito.
El contar con un “propósito” bien definido y una cultura organizacional alineada, permitirá definir de buena manera el plan de negocios y sus objetivos, diseñando una estrategia financiera que permita habilitarlo y hacerlo sostenible en el tiempo, agregando valor.
La agenda de sostenibilidad está redefiniendo la relación entre las empresas, sus empleados y stakeholders, esto representa un punto de inflexión en la agenda social, de sostenibilidad, medio ambiente, y gobernanza (ESG). Dentro del propósito organizacional, ya no puede faltar esta mirada.
Las implicancias de este cambio radical en la forma de hacer empresa, es que se obtienen mejores resultados a largo plazo, trabajando conforme a una buena cultura y principios organizacionales, a diferencia de sólo aplicar procedimientos y reglas circunstanciales, existiendo una clara correlación entre ingresos, gastos y beneficios. Estos últimos no son suficientes por si solos si se quiere tener una mirada sostenible y sustentable, ya que se debe evaluar también cual es la contribución al entorno, economía circular y medio ambiente.
Actuar de forma socialmente responsable genera una mejora de imagen reputacional, permitiendo a las empresas estar mejor posicionadas para afrontar circunstancias adversas y desarrollar estrategias más robustas.
Hoy es imprescindible adoptar un modelo de negocio y estrategia financiera que cubra las necesidades económicas, ambientales y sociales de los distintos grupos de interés, sin poner en riesgo las necesidades futuras y la generación valor.
Cristian Retamal
Director de Eurocorp S.A.
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