El cambio climático se ha convertido en uno de los desafíos más críticos y urgentes para las organizaciones a nivel global. No se trata solo de una cuestión ambiental, sino de un riesgo estratégico que puede impactar directamente en la estabilidad financiera, reputacional y operativa de las empresas.
En este contexto, los directorios tienen la responsabilidad de integrar la sostenibilidad y la gestión de riesgos climáticos en sus agendas estratégicas.
¿Por qué debería preocuparle el cambio climático a tu directorio?
El cambio climático no es solo un tema de sostenibilidad, sino una cuestión de gestión de riesgos y resiliencia empresarial. Las empresas enfrentan:
- Riesgos físicos: eventos climáticos extremos, inundaciones, incendios y sequías que pueden afectar la operación y la cadena de suministro.
- Riesgos de transición: cambios regulatorios, impuestos al carbono y presiones de inversionistas y consumidores hacia prácticas más sostenibles.
- Riesgos reputacionales: una mala gestión ambiental puede impactar la percepción pública y la confianza de los stakeholders
El cambio climático no es solo una cuestión ambiental; es un desafío empresarial. Un directorio proactivo y preparado no solo protege el negocio de riesgos, sino que también posiciona a la empresa como un referente en liderazgo responsable.